Según normas: DIN 50979 e ISO 15726 Pasivación clara o negra. Posibilidad de aplicar sellante en cualquiera de los casos. Proceso alcalino para la electrodeposión de una aleación de cinc-níquel con un contenido de níquel del 12-15%. Se consigue una excepcional protección contra la corrosión con alta resistencia a la temperatura cumpliendo las demandas de la industria del automóvil, incluso después de un shock térmico. Compatible con metales ligeros y es una base ideal para tratamientos posteriores exentos de cromo hexavalente que cumplen la norma europea ELV.

Estamos especializados en la aplicación de zinc electrolítico sobre todo tipo de piezas metálicas. Los procesos químicos empleados, el sistema de gestión de la Calidad y el plan de Protección Ambiental, nos garantizan unos excelentes resultados para satisfacer las necesidades de nuestros clientes, respetando el Medio Ambiente.

Este recubrimiento metálico de Cobre se caracteriza por su gran capacidad anticorrosiva y antioxidante; es aplicado en el sector industrial por ser un excelente conductor de electricidad en piezas que después deban ir soldadas. Se puede aplicar también como base para un posterior baño de Níquel, Cromo o Estaño en piezas que requieran una mayor protección y resistencia. Su principal aplicación es como base para un posterior baño de Níquel, Cromo o estaño en piezas que requieran una mayor protección y resistencia que garantizan una durabilidad en el tiempo.

Proceso utilizado para acabado decorativo dando color y brillo uniforme en las piezas cobreadas y niqueladas. La terminación está protegida con laca poliuretánica horneable y puede ser aplicada sobre hierro y su fundición, zamac, cobre, plomo ... Se realiza en baños quietos y rotativos, inclusive el laqueado.

La pasivación es de suma importancia para mantener un nivel alto de rendimiento del acero inoxidable. La resistencia a la corrosión es sin duda una característica clave del acero inoxidable. Sin ella, la funcionalidad de un acero inoxidable está sumamente en peligro. Para asegurarse de que la resistencia a la corrosión del acero inoxidable se mantenga el mayor tiempo posible durante su uso, la superficie del acero inoxidable se manipula para permanecer en un estado pasivo.

Gracias a nuestro pulido mecánico-manual con discos, pastas y cintas de pulir conseguimos la eliminación de poros y rayas en la superficie y un abrillantado de todo tipo de metales. Tratamos todo tipo de materiales: hierro, latón, cobre, aluminio y acero inoxidable pudiéndole dar el acabado que el cliente desee pulido brillo o pulido mate satinado.